PINGANILLOS, ¿UN AVANCE A LA CULTURA O UNA CULTURA QUE SE ESTANCA CON VOCES DEL PASADO?
Cada vez que veo la televisión y por cansancio de ver tanta tontería pongo el dedo en el mando y voy pasando canal por canal hasta que consigo quedarme un buen rato en estos de interés general o en los documentales que presenta TVE. Y de vez en cuando paro en el canal regional (C. valenciana), Canal Nou (9), y me da un desespero de estos que enseguida lo cambio. Luego de que me ha pasado la rabieta, me entra la curiosidad por leer este divertido canal y empiezo a buscarle los lados amables, pero de verdad que son más las cosas que no comparto y que me incomodan que las que me agradan, luego me pongo en los zapatos de las políticas del Estado y de las políticas de la comunidad para tal asunto, o mejor en asuntos de televisión comunitaria y de televisión en general. En efecto, después de ver y empezar una lectura observo cuidadosamente como cada vez se deteriora la unidad española e invitan desde estos espacios a la división del pueblo español. Se puede palpar y deducir sin tener que recurrir a profesionales y magos de la palabrería, politiqueros e iluminados como venden la idea de una cultura basada en un lenguaje (valenciano) que por cierto creo que ni el “50%” de la población habla dicho idioma o mejor el dialecto que se vende en la comunidad. Y es que si oteas un noticiero del Canal Nou se mezcla el castellano, con el dialecto valenciano más el Español, y da una mezcolancilla toda curiosa parecida a los bocatas que vende Antonio en el bar del barrio de la estación. No concibo que en plena debacle de la economía, en plena ausencia de empleo y en pleno caos de España se piense en continuar con políticas de aislamiento de culturas y de pretender andar por el camino de Don Quijote de la Mancha. La cosa no está como para darse el lujo de dejar escapar un solo visitante ahora que el AVE traerá más turistas de todo el país; no se pueden dar el lujo de sacar un solo turista extranjero que viene por las carreteras del norte, venidos de Francia y otros países del centro y sur de Europa. Considero que para esto último deberá prestar la comunidad unos servicios óptimos ya que la economía primordial es el turismo, y lo que reclama el turismo es una atención personalizada, una atención directa donde los idiomas cuentan. Pero resulta que el turista un año antes empieza a planificar sus vacaciones y escoge el país, si es España, éste se empieza a meter en la cabeza que en este destino se habla el idioma español, pero qué sucede, llega a una comunidad y lo primero que ve es un panorama totalmente diferente. Miremos otro ejemplo: Los consumidores de coca cola, a los que nos gusta esta bebida, también nos gusta su publicidad, nos gusta, es así, nos encantan sus anuncios, y nos limitamos a verlos porque como no se ven esos canales que presentan su programación en un idioma o en un dialecto que no se sabe por ejemplo si son en valencianocastellanoespañol, o son en un dialecto que sólo lo entiende las personas aférrimas. Puedo pecar por irreverente y por irrespetuoso, pero eso es lo que veo. Te sientas a ver las noticias y la mitad son en valenciano, el entrevistador en su dialecto valenciano, la entrevistada contesta en español o en castellano y terminas ni entendiendo al uno ni entendiendo al otro. También en otra escena parecida, el entrevistador en valenciano y el entrevistado respondiendo en castellano valenciano. Luego me da por preguntar a un amigo que reniega todo el tiempo de los valencianos y me habla del catalán, y dice él, que la mejor lengua es el catalán y veo que el catalán también es otro dialecto; y es que los dialectos son estos que la lengua no los califica como idioma. Bien, pero también ahí es donde me he puesto a mirar y unos desean la independencia y quieren su economía y su lengua propia, y cuando acá (C. Valenciana) se habla de esos temas de libertad o de independencia del País Vasco, es un tema de locura. Y me pregunto, entonces pa`qué más lenguas, o más dialectos. Unificar al pueblo español es de verdad darle la unidad que este país aguerrido y sufrido se merece, la lengua castellana hace tiempo que fue superada por la lengua española, y pare de contar. Es así, que el respeto a la diferencia, a las culturas, al visitante y al turista, está en darle la importancia de podernos comunicar de la forma más sencilla y mas idónea posible. Mi señora madre dice: “al pueblo que fuereis…haréis lo que viereis”. Frases que sin lugar a dudas no tienen discusión, lo que si tiene discusión es cuando te quedas en ese pueblo, cuando pagas impuestos y cuando aceptas las reglas del juego.
Lo de los pinganillos, me parece que tanto el Gobierno como los representantes de las comunidades no aceptan una España unida, no creo que sea de donde salen los 350.000 euros anuales para el pago o salarios, creo que no les interesa de donde pueda salir ese dinero, por que saben que es del bolsillo de Juan pueblo. Lo que sí veo es el retroceso, el regreso al campo de Don Quijote de la Mancha, lo que oteo es una España totalmente dividida y atizada por los medios de comunicación y las autoridades que ven la cultura a través de la lengua como la muralla que defendió a capa y espada los Reyes Católicos del siglo XIV.
No hay comentarios:
Publicar un comentario